"Mantener la salud de mis vecinos y a la vez, llevar sustento a mi hogar", esa es la prioridad de la frutería La Bendición, ubicada en la esquina entre Avenida A y Calle 23, en El Chorrillo. Su propietaria es María García.

Esta panameña emprendedora dijo que desde hace 4 años, ésta es su forma de trabajar. Añadió que aunque no gana mucho dinero, al menos le alcanza para las necesidades de su familia.

La señora María relató que se levanta temprano, para ir al Mercado de Abastos y comprar la mercancía, que consiste en piñas y papayas. En esta época, la venta de bolsitas de mango proporciona muchas ganancias y para ella es rentable.

El respaldo de sus vecinos es fundamental para María, ya que son ellos los que compran las frutas, además de los visitantes que también se acercan a partir de las 8:00 de la mañana, hasta las 4: 00 de la tarde. A esa hora, se termina la mercancía y los predios de su local se tornan inseguros.

De acuerdo con María, el apoyo de la Policía Nacional es importante para el desarrollo de pequeñas empresas, como la de ella. Comentó que eso permitirá que los turistas y otros ciudadanos, puedan entrar en El Chorrillo; además alejará a los jóvenes de las drogas y pandillas. En este punto, García subrayó que si bien los delincuentes han respetado su local, la situación de violencia que vive el área la afecta económicamente.

Recordó que cuando abrió el puesto, en el 2003, la venta era mayor, ya que iba al mercado en busca de 4 docenas de piñas y las vendía en dos días. No obstante, en los últimos días la venta es poca y a veces se daña la mercancía. Eso la ha llevado comprar dos docenas de piñas, y sus ganancias disminuyeron.

A pesar de esta situación, María dijo que se levanta con mucho ánimo, para atender en su puesto a todo aquél que busque un producto fresco.

CLIENTES

Para aquéllos que son víctimas del calor, en la avenida A no hay nada mejor que visitar La Bendición.