¡Se atrevieron! Caminaron desde la sede de la Policía Técnica Judicial (PTJ) en el corregimiento de Ancón y, de repente, cayeron de rodillas en varias ocasiones antes de llegar hasta los predios de la Presidencia de la República. Ese era su destino final.

En ese trayecto, las caras de admiración de los transeúntes fue notoria. Algunos comentaban en la avenida Central: "Allí es donde el Gobierno debe actuar"; "ellos merecen que se les haga justicia", entre otras expresiones.

Esta singular protesta fue hecha por los residentes de las 42 comunidades de Bocas del Toro, afectadas por el derrame de petróleo el pasado 4 de febrero.

Griserio Caito, vocero de los indígenas, reiteró que exigen la indemnización de 500 millones de dólares a Petroterminal de Panamá (PTP).