"Obedezcan a sus padres". Ese el consejo que le da Mario Mendoza a los jóvenes como él.

Él tiene 23 años y hace ocho le dio un giro a su vida, pues asegura que "pertenecía al mundo, estaba perdido y quise tomar la decisión correcta y justa para salir de eso". Por tal razón, gracias a su madre, desde ese tiempo empezó a asistir a la iglesia y a aceptar a Dios en su corazón.

Actualmente, Mario es uno de los líderes del grupo juvenil CADES iglesia Cuadrangular de Los Andes Camino de Santidad, en el que los jóvenes se capacitan en una disciplina de valores humanos y espirituales para lograr sus metas.

Al grupo asisten jóvenes con distintos problemas. "Hay quienes se han metido en las drogas, en la promiscuidad, quienes han sufrido abuso sexual, engaños, maltrato emocional, pero, sobre todo, por la falta de amor de sus padres", explicó Mario. Asegura que al no tener la atención de los progenitores, que sólo son "proveedores económicamente", sumado a las películas, las novela, los adolescenetes se inducen a tener sexo y hasta a portar armas.

Y este es el objetivo de Mario y su agrupación, sacar a los muchachos de este mundo y evitar que otros caigan en esa vida, pues "cada uno nació con un propósito y la idea es ayudarlos a salir adelante, a que ellos creen una identidad de valores con conductas positivas, desarrollando el propósito que Dios les ha puesto", expresó.

Es por eso que después de integrarse al grupo como forma de motivación a la persona se le da un seguimiento interno. Además, en la iglesia se le da consejería a madres y padres.

Mario admite que el trabajo no es fácil, pero sabe que tampoco es imposible "Sé que es difícil, porque vivimos en un mundo de influencias y maldades, pero Dios nos dejó una conciencia para que como personas tomemos la mejor decisión para en el futuro, tener una familia feliz, dejar todo lo malo y volver a retomar los valores positivos", culminó.

LA CITA

Todos los sábados a las 5:00 p.m. hay reuniones juveniles en la Iglesia Cuadrangular de Los Andes # 2.