Molestos y en un estado de incertidumbre viven los residentes del sector de la Compañía en El Valle de Antón, luego de que les derribaran el puente para construir otro, y aún están esperando que lo restauren.
Niños, jóvenes y adultos enfrentan dificultades para llegar hasta sus hogares, porque como no hay puente deben pasar entre las piedras del río, y cuando llueve, es muy peligroso, dijo Tairi Villarreal, residente del área.