Las invasiones de tierra en Arraiján son un grave problema social, que preocupa a las autoridades del Gobierno, debido a los peligros que enfrentan los precaristas cuando invaden tierras deshabitadas sin la adecuada planificación.

El Ministerio de Salud, de Vivienda y SINAPROC, preocupados por la situación, conformaron una comisión interinstitucional para reordenar las áreas, a fin de evitar epidemias o desastres naturales.

La última ocupación ilegal en las áreas revertidas, colindante con las barriadas La Cascada y Las Nubes los ha puesto en alerta.

Un informe de la comisión determinó que muchos de los invasores ocuparon áreas con topografía sumamente inclinada, donde levantaron casas de zinc y madera, por lo que de suscitarse un deslizamiento de tierra, muchas de las estructuras temporales serían arrasadas.