Eran dos de los árbitros elegidos para pitar en la final, y ellos también se equivocaron, ¡de qué forma! Jorge Larrionda anuló un tanto legítimo de Inglaterra sobre Alemania, y Roberto Rosetti, a los 26', validó el gol que puso en ventaja a Argentina ante México. En este caso, Messi habilitó a Carlos Tévez, rechazó el guardián azteca, alcanzó a rematar Messi, y Tévez la cabeceó, aparentemente en posición fuera de juego, en el primer tanto "albiceleste".

Hasta ese momento, México estaba jugando algo mejor. Pero a los 32' una gravísima falta de concentración de Ricardo Osorio permitió que Gonzalo Higuaín conquistara el segundo, al ganar el mano a mano con Oscar Pérez.

A los 52', una diana extraordinaria de Tévez, que le pegó como venía, desde fuera del área, y la clavó en un ángulo, en una de esas escasas pequeñas obras de arte. México trató de marcar el de la honra, y Javier "Chícharo" Hernández lo consiguió, a los 67', para el 3-1 definitivo. Ahora, tendrán que medirse argentinos y alemanes en partido de difícil pronóstico.

Tras el partido, el seleccionador argentino, Diego Maradona, aseguró que su equipo fue superior a México y restó importancia al error arbitral que significó el primer tanto de su equipo.

"Ganamos un partido con mucha tensión, nos conocíamos bien los dos, sabíamos que cuando nosotros nos decidiéramos a atacar podíamos sacar ventaja. Argentina fue superior y no pasamos problemas", indicó el técnico.

Maradona señaló que es normal que los mexicanos estén enfadados con el error arbitral, pero dijo que es más importante la indulgencia del colegiado con las faltas que sufrió Lionel Messi.