El capitán francés, Zinedine Zidane, guardó reposo ayer por prescripción médica y no participó, por tanto, en el entrenamiento a fin de recuperarse del golpe que sufrió durante el partido contra España en octavos de final.
La lesión de Zidane, sin embargo, no parece seria y podrá jugar, en consecuencia, el partido de cuartos de final contra Brasil, este sábado en Fráncfort.
"Se trata de un pequeño golpe que sufrió contra España y Zidane está en la sala de tratamiento", dijo el médico.
|