En el año 2002, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) realizó un estudio que dio como resultado un "Plan Maestro" para el manejo de los desechos sólidos no peligrosos en Panamá.
Ikuo Mori, del equipo de Expertos la JICA, explicó que debido al crecimiento de la población y por el aumento en el consumismo en los panameños, se hicieron modificaciones al plan.
"Ahora hay muchas edificaciones dentro de la ciudad y se están expandiendo y esto afectó mucho el estudio", dijo Mori a DíaaDía.
Y es que revisando 4 de los 8 tomos de la investigación hecha por la JICA, en el año 2002 se generaban mil toneladas de basura por día, pero ahora son mil 800 toneladas, lo proyectado para el 2010.
Por ello se modificaron ciertos aspectos del Plan Maestro, y ahora se concentran en mejorar el servicio de recolección para que la ciudad tenga un ambiente sano. También hay mucha preocupación por adecuar el relleno sanitario para reducir el impacto ambiental que produce y disminuir la generación de basura. Este último punto, de vital importancia, ya que según Mori, la población debe aprender a consumir menos materiales y disminuir la carga de desechos.
"Hay que hacer la separación de la basura en la casa", recalcó Mori. En este aspecto, a partir de septiembre, el Relleno Sanitario de Cerro Patacón tendrá otra administración y con ello otra visión, según explicó René Paniza, Asesor Ambiental de la Alcaldía de Panamá.
Paniza indicó que la empresa URBACER PLOTOSA, S.A, en coordinación con las autoridades municipales, se encargará de hacer una gran transformación del relleno sanitario de Cerro Patacón.
Como meta se estableció que en 12 años, se debe mejorar la eficiencia del relleno y mejorar el manejo de los desechos sólidos.
El contrato con la empresa contempla aprovechar el material reciclable y el biogás proveniente del relleno sanitario, aplicando el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL)con una inversión de 10 millones de dólares.
La aplicación del MDL permitirá a las municipios de Panamá y San Miguelito beneficiarse de la venta de los Créditos de Carbono, que se obtendrán por la reducción de gases de tipo invernadero (CO2) que genera la acumulación de desechos sólidos, siguiendo las normas del Protocolo de Kyoto, del cual Panamá es signatario.
Estos beneficios cubrirán parcialmente el costo de la calidad de tratamiento de los desechos sólidos, recalcó Paniza.