DIAaDIA hizo un recorrido con REVISALUD en las principales calles del distrito de San Miguelito y también lo hizo en los camiones recolectores de la DIMAUD en el distrito de Panamá.
Madrugamos y durante dos días hicimos de recolectores.
En San Miguelito había tinaqueras vacías, mientras que los desechos estaban tirados a su alrededor. ¡Qué vergüenza!
Visitamos el Río Palomo, ese en el que una vez vi peces y aguas transparentes, y se había convertido en un vertedero de basura, con aguas negras y, en vez de peces, flotaban botellas y bolsas plásticas, zapatillas viejas. De sus aguas emergía una estufa y lo que quedaba de una lavadora.
En otros lares, allá en los edificios llamados los "Abanicos de Villa Guadalupe", aún en San Miguelito, los moradores parecen tener complejo de basquetbolistas, porque su preferencia es tirar las bolsas con desechos desde los balcones de los apartamentos para ver si aciertan y anotan una canasta en el tinaco. Pero no atinan una. Todas las bolsas con desechos caen fuera.
Tanto con REVISALUD como con la DIMAUD notamos una situación generalizada que nos hizo pensar: en Panamá y San Miguelito no hay un buen servicio de recolección de basura porque las personas no se ajustan a los horarios. Había muchos desechos tirados y regados. Muy pocos estaban en los tinacos y las tinaqueras.
Desde las seis de la mañana y en menos de tres horas se recogieron 7.5 toneladas de basura. El camión estaba lleno. Pero al mirar hacia atrás y supervisar el recorrido hecho... ¡había más basura!
El problema es que además de que la comunidad dispone mal de sus desechos sólidos, porque no los clasifica y los mezcla todos en las bolsas, la gente no sigue los horarios establecidos y le da igual depositarlos en el tinaco, cualquier día y a cualquier hora.
"No es un problema de recolección. Es un problema de cultura, porque la comunidad no saca la basura cuando le toca", recalca Abraham Goti, director de la DIMAUD. Y tampoco es que no haya organización. Cada municipio tiene horarios de recolección, los que pueden ser nocturnos y diurnos.
En cuanto a la DIMAUD, el sistema de servicio es supervisado satelitalmente mediante un Sistema de Posicionamiento Global (GPS por sus siglas en inglés) que ese día mostró las casi 103 paradas que hicimos en el camión recolector hasta llegar a Cerro Patacón.
Una vez en las puertas del Relleno Sanitario, el camión recolector fue pesado y marcó 7.5 toneladas de basura. Más tarde los desechos fueron depositados en la gran mole, donde los pepenadores iniciaron su trabajo.