
Tuvimos la oportunidad de entrevistar a esta famosa pareja en la que es evidente que el amor brota a flor de piel, a tal punto que por un instante me sentí sobrando, o como dicen los panameños, un violín.
Para ellos la manera en que se dio a conocer su relación no fue la correcta, ya que -según la presentadora- no se respetó su petición de darle tiempo. “Cuando tienes un novio no vas el primer día y se lo presentas a tus padres, uno espera unos días”, así lo quería hacer ella; “no era cuestión de esconder, la cuestión es que no era el momento, había que estar seguro para anunciarlo”, mencionó.
Viven una luna de miel
Para ellos ya pasó el incómodo episodio y ahora disfrutan su romance y de estar juntos, incluso ya no temen hablar de algunas intimidades, como cuál sería su noche perfecta. “En la playa con unas copas de vino rose”, dijo Andrés entre risas pícaras.
Su amor ha crecido tanto que las palabras muchas veces sobran, ellos tienen su propio lenguaje. Si están en el mismo lugar, los mimos y las expresiones de amor no cesan. Andrés le guiña los ojos y ella le achurra la cara, le hace cejitas o aprieta duro los ojos. ¡Puro ‘loveee’!
Serán tus ojos, tu pelo, tus dientes.
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Y si se pregunta qué los atrae uno del otro, pues a Andrés le encantan los ojos, la sonrisa y las manos. En cuanto a ella le gusta su cabello, los ojos y su dentadura, que considera espectacular.
Para el amor no hay edad
En cuanto al tema de la edad, la presentadora, que es algunos años mayor, no lo considera como un gran factor. “Yo podría ser más joven que él e igual inmadura o el mayor e inmaduro, es algo relativo”, indicó.
En cuanto al matrimonio no es un tema que les cause urticaria, pero por ahora quieren disfrutar de la relación y otras cosas tienen prioridad.