Luego de meses de trámites para que a varias barriadas denominadas como precaristas en Pedregal, en Chiriquí, se les instalara la energía eléctrica de manera legal, al parecer todo ha quedado estancado, según el representante del área, Rubén Guerra, puesto que cada vez son más los requisitos que solicita la empresa de distribución eléctrica.

Los Bomberos dieron los permisos, las diferentes instituciones también; se dio un aporte económico y ahora manifiestan que necesitan unos sellos de aprobación del MIVI, MOP y otras entidades.

"Nos están soltando los requisitos como a gotero y así no podemos desarrollar ni avanzar como se debe y eliminar el riesgo de las telarañas eléctricas", dijo.