Hola Moza, mi nombre es Michelle y te escribo porque tengo un grave problema y ya no le encuentro solución.
Sucede que tengo un novio que es mayor que yo. Él es un hombre muy respetuoso, atento y ha demostrado que me quiere, además de ser trabajador; por lo menos conmigo, se ha portado bien.
Mira, yo tengo 16 años y él 25. Somos novios, porque mi madre lo aceptó así, y como siempre que salimos lo hacemos con ella, hemos llevado una muy buena relación.
Sin embargo, desde que entré a cuarto año en la escuela, conocí a un compañero de salón, que desde el primer día que me vio, me confesó su amor por mí.
Él es un hombre muy atento y cariñoso, compartimos muchas cosas juntos. Por ejemplo, desayunar, almorzar, estudiar y muchas otras cosas.
Todo esto te lo digo, porque ahora mi pareja está celoso del chico. Imagínate que mi novio me ha prohibido que salga con mi compañero, y lo peor, que vaya a mi casa a estudiar conmigo.
Realmente, necesito que mi compañero me ayude, porque sabe mucho de química, física y biología. Lo peor es que no puedo decirle que llegue a escondidas, pues mi novio vive frente a mí.
Moza, yo te he escrito porque no le he confesado a nadie que ese chico a mí también me gusta, y en nuestros ratos libres nos hemos dado una que otra muestra de cariño. No sé qué hacer, dame un consejo.
NO VAYAS TAN DEPRISA
Michelle, creo que debes ir con calma, tu vida hasta este momento está acelerada. Tal vez por eso, te sientes presionada y no sabes qué hacer.
Te recomiendo que hables con tu madre y trates de vivir una vida acorde con tu edad. Con esto, quiero decirte que dejes de salir con hombres mayores que tú, pues aunque sea respetuoso, atento y trabajador, eso no quita que te lleva más de 9 años y que, obviamente, su mentalidad es más seria.
De tu compañero de clases, quiero decirte que es obvio que te atraiga; a muchos les pasa a esa edad. Esas son ilusiones de escuela, y tal vez, aunque lo dudes, es mucho más sensata que tu otra relación.
Tienes un gran problema, porque no sabes lo que podría hacerle tu novio a ese chico, si lo sigue viendo en tu casa. Por eso, creo que tienes que hablar con tu madre para que interfiera; pero... ¡ojo!... no es dejar a uno para empezar con otro. ¡Suerte!
|