Llegó a Portugal siendo considerada como una de las "Cenicientas" del torneo, pero con agallas y coraje se convirtió desde el primer momento en la peor pesadilla y principal verdugo de las "grandes" potencias del fútbol.

La selección de Grecia sorprendió al mundo, al debutar en la Eurocopa con un triunfo sobre los anfitriones por 2-1. Posteriormente, igualó con España 1-1 y a pesar de caer por 2-1 ante la débil Rusia, logró avanzar a los cuartos de final.

En esta ronda, Grecia se impuso 1-0 a Francia y en semifinal dejó en el camino a República Checa, al vencerlo por igual marcador, para avanzar a la final.

En el partido de ayer ante Portugal, los griegos demostraron toda la tenacidad defensiva que tuvieron durante todo el torneo, situación que los llevó a coronarse campeones por primera vez en la historia.