Será una dura prueba. Desde el pasado 23 de octubre, la enfermera Lidia Rojas no ha vuelto a subir un bus, pero hoy lo hará para la reconstrucción del caso del bus incendiado, del que es una de las sobrevivientes.
Pasada las 10: 00 a.m. de ayer, Rojas salió de la Asociación Panameña de Ayuda al Niño Quemado (APANIQUEM), donde recibe sus terapias, pues en Panamá no hay un centro de atención de adultos quemados.
La enfermera dijo que, aunque no habrá fuego en el bus, estará presente para esclarecer todo lo que ocurrió en aquel accidente que cobró la vida de 18 panameños.
"A veces, las terapias son dolorosas, pero me digo a mí misma: "Ésta no soy yo", y trato de pensar cosas bonitas para apaciguar el dolor", relató. Contó que después del accidente cobraba su cheque completo, pero ahora sólo recibe el 60% de su salario.
"Ese 40% que me sacan, hace un hueco bien grande frente a tantos gastos que tengo. Cosas como esas son bien injustas, pero hay que aprender a vivir con eso", dijo. Lidia anhela volver a trabajar, aunque admite que no será la misma al 100%. Sin embargo, enfatizó que "lo poco que yo puedo dar, para mí es mucho, porque a la vez puedo aliviar el dolor de otra persona". También espera un cambio en el transporte público.
TODO ESTA LISTO
Por su parte, la fiscal Cristina Cedeño aseguró que todo está listo para la reconstrucción del hecho hoy, a partir de las 9 de la mañana.
Agregó que para la diligencia judicial, que puede extenderse hasta el sábado, se solicitó apoyo en entidades como SINAPROC, Policía Nacional, el Hospital Santo Tomás y el Ministerio de Salud, ya que no se puede olvidar el estado psicológico de las víctimas.
CAMBIOS
La ATTT ordenó que hoy y mañana se interrumpa el flujo vehicular en la avenida Martín Sosa, a partir de las 8:00 a.m.
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