Multimillonaria fue la inversión que realizaron los países que participaron y están en el Mundial de Sudáfrica, al contratar a técnicos por cifras exorbitantes. A escasos seis días de culminar este torneo, ha quedado la interrogante en muchas de estas naciones. ¿Valió la pena gastar tanto dinero en estos entrenadores?

En Inglaterra parece no haberle importado este gasto, pues a pesar de que su equipo fue eliminado, el italiano Fabio Capello, el técnico más caro del Mundial Sudáfrica 2010, quien cobra 9.9 millones de dólares por año, seguirá en el cargo, una cifra abultada, a diferencia de los 250 mil que le pagaron al técnico de Corea del Norte, Kim Jong Hun. Qué suerte tiene Capello.

Otros con salarios millonarios, cercanos a los de Capello no han tenido la misma fortuna que el italiano, han sido despedido de sus puestos. Pero el que de seguro recibirá un aumento considerable será Óscar Washington Tabárez quien, a pesar de cobrar sólo 300 mil anuales, tiene a Uruguay entre los cuatro mejores del mundo y con opciones de llevar a su equipo, a su tercera Copa Mundial en su historia. ¡El dinero no lo es todo!