Culebras de toda clase y tamaño se pasean con mucha frecuencia por las principales calles de Santiago, creando temor en los moradores que están cansados de los lotes sucios y que piden a las autoridades sancionen a sus dueños.

Esta serpiente mantuvo atemorizados a los habitantes de las Barriadas Paso Las Tablas, El Carmen y Calle Cuarta Final de Santiago, ya que la misma permanecía escondida en los herbazales hasta la hora de que deseaba comerse una gallinas, perros o gatos, pero al no encontrar nada en una lugar cercano intento cruzar la calle y fue arrollada por un carro que la mató.

La boa (constrictor) aunque no es agresiva ni venenosa tiene mucha fuerza para agarrar su presa, un niño de poca edad podría ser presa fácil para esta culebra.