Estaba en una reunión de padres de familia y me dice una de las participantes: ¿puedo conversar con usted? Yo le contesté, claro que sí. Lo que pasa es que le he perdido el sentido a todas las cosas que realizo, me dice ella.
Le pregunto:
¿a qué se debe esa pérdida de sentido?
Lo que sucede es que tengo siete meses de haberme separado de mi esposo, hace cuatro meses que no me renovaron el contrato en el trabajo y no he conseguido todavía trabajo; la energía eléctrica me la suspendieron por atrasarme en la mensualidad, ya que la canasta básica ha aumentado y he tenido que gastar los ahorros que tenía.
En ese momento aproveché para preguntarle cuántos hijos tenía. Ella me respondió que cuatro.
Así como esta madre soltera hay miles de mujeres que están experimentando situaciones adversas, que las lleva a perder el sentido de las cosas o también las puede motivar a ser más fuertes para seguir adelante.
Le pregunté a esta madre soltera: ¿usted qué le diría a una madre que esté experimentando todas estas cosas, o algunas de ellas, que está pasando usted. Ella sonríe y me dice: que no se rinda, a pesar de todas las adversidades que puedan venir a su vida, aunque llegue un momento en que una piensa que nada va a cambiar, que cada sonrisa de su hijo es como si él o ella estuviera diciéndole: mamá, no te rindas, yo te necesito. Que confíe en Dios como nunca, que busque ayuda como yo lo he hecho.
Cualquiera que sea la dificultad que estés experimentando en tu vida familiar, laboral, académica entre otras, NO TE RINDAS, sigue adelante y confía en Dios, que te dará la fuerza para seguir adelante.
Pueden escribirme si necesitan algún tipo de orientación.