Pueden creer que siempre tiene la razón y exigir que padres y hermanos hagan lo que ellos dicen.
Hacer sentir mal, con hechos y palabras, al hermano(a) al que le prestan menos atención.
Hermanos que se sienten rechazados
Celos, envidia, rivalidad, competencia malsana o malentendida, pues estos niños van creciendo con esa "visión" de que tengo que esforzarme por superar a mi hermano para que mis padres me quieran como lo quieren a él.
Autoestima baja, pues crecen sintiendo poco valor por su persona. Sienten que por mucho que compitan siempre están bajo el nivel de su hermano(a).
