Se están sacrificando por su hijo. Y no es para menos, pues el pequeño Isaac David Novoa Garcés nació completamente sano el 24 de septiembre de 2002.

Un año después, para el día de su cumpleaños, sus padres esperaban verlo caminar; sin embargo, tuvo una recaída que los llevó al Hospital del Niño. Allí pasó cuatro días con fiebres muy altas y permaneció hospitalizado por tres meses. Isaac estuvo en cuidados semi-intensivos y le dio un paro cardio-respiratorio; esto empezó a afectarle su sistema inmunológico y se le detectó la bacteria Estafilococo Cuagulasa positiva, la cual desencadenó múltiples complicaciones en los riñones, hígados, pulmones, además de serios daños cerebrales.

Posteriormente a estas complicaciones, el niño no camina, no habla, no tiene movimientos voluntarios y su mirada se nota perdida.

Gracias a Dios empezó a progresar, pero quedó con secuelas muy graves, pues a causa de los daños cerebrales sufre una crisis respiratoria, debido a la falta de envío de órdenes al cerebro hacia su sistema respiratorio y, según dicen los galenos, esto se denomina "Apnea", lo cual hizo que lo calificaran como un niño de alto riesgo para una muerte súbita.

Abdiel Novoa, padre de Isaac David, manifestó a DIAaDIA que desde enero de este año los médicos pidieron realizarle unos exámenes que sólo lo practican en el hospital San Fernando.

Dicho examen se llama "Estudio del sueño", y dependiendo de estos resultados determinarán si este mal puede ser sobrellevado con medicamentos o, por el contrario, le informarán que será obligatorio conectarlo a un aparato llamado Sipac. Anayansi Lasso, especialista en neumología pediátrica, informó en una nota que el niño requirió de una traqueotomía y sospecha que hay aspiración crónica, pues sus padres han notado que está sufriendo de pausas respiratorias sin causas claras que podrían condicionar episodios convulsivos y aumentar el grado de deterioro neurológico.

AMOR

Sus padres, Abdiel y Miriam, se vieron obligados a dejar sus trabajos por atender a su hijo Isaac David.