El veterano estudio Metro Goldwyn Mayer (MGM) agoniza bajo una deuda multimillonaria, mientras busca desesperado una solución financiera, que permita al león más famoso de Hollywood seguir rugiendo en los cines del siglo XXI.
La amenaza de la bancarrota inminente sobrevuela a esta productora de clásicos como "Lo que el viento se llevó", propietaria de la saga del agente secreto James Bond, y encargada de desarrollar las esperadas películas sobre la novela "The Hobbit" .
MGM acumula un déficit de 3 mil 700 millones de dólares y, a pesar de su ingente catálogo de películas, sus ingresos se han visto duramente golpeados por la crisis, especialmente la división de DVD. ¡Mala esa!