
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
David Morán Moya, de 34 años.
Murió en el centro de salud de San Isidro.
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
David Morán Moya, de 34 años.
Murió en el centro de salud de San Isidro.
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
David Morán Moya, de 34 años.
Murió en el centro de salud de San Isidro.
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
David Morán Moya, de 34 años.
Murió en el centro de salud de San Isidro.
En esta casa de alquiler residía la pareja, sitio donde se generó el homicidio.
Fotos: Q. MORENO/ M. MURILLO
David Morán Moya, de 34 años.
Murió en el centro de salud de San Isidro.
“Mi nieta quería separarse de él porque le pegaba, e incluso una vez lo metió preso. Ella me enseñó sus moretones y ya estaba cansada de vivir sufriendo. El domingo llegó a mi hogar llorando, ya que lo había cortado, pero no imaginó que lo asesinaría”, recordó con tristeza Arsenia Pérez, abuela de Mara.
La pareja tenía un año y seis meses de vivir en unión, en compañía de dos hijos: uno de tres años y de seis meses (hijo de ambos), que podrían quedar en orfandad, pues Mara ha sido puesta a órdenes de las autoridades correspondientes.
Entretanto, Martina de Moya, madre del asesinado, aseguró que su nuera era una loca y lo largaba de la casa, pero que luego le pedía que volviera.