Buenísima, la tanda del fin del mundo


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Rasta Jam no se quedó con las ganas y también puso a recordar al público.

Fotos: Elio Palacio

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    Rasta Jam no se quedó con las ganas y también puso a recordar al público.

    Fotos: Elio Palacio

  • Buenísima, la tanda del fin del mundo

    La gente estaba con las manos arriba.

  • Buenísima, la tanda del fin del mundo

    Jampier y dj Chino tiraron plenas hasta decir no más.

  • Buenísima, la tanda del fin del mundo

    Hasta “Don Colchón”, de los almacenes El Campeón, vivió la tanda.

  • Buenísima, la tanda del fin del mundo

    DJ Tavo y Lea animaron al público con los famosos coritos.

  • Buenísima, la tanda del fin del mundo

    Uno de los que no se perdió la tanda del recuerdo fue Cat Boy.

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    Rasta Jam no se quedó con las ganas y también puso a recordar al público.

    Fotos: Elio Palacio

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    La gente estaba con las manos arriba.

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    Jampier y dj Chino tiraron plenas hasta decir no más.

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    Hasta “Don Colchón”, de los almacenes El Campeón, vivió la tanda.

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    DJ Tavo y Lea animaron al público con los famosos coritos.

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    Uno de los que no se perdió la tanda del recuerdo fue Cat Boy.

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    Jampier y dj Chino tiraron plenas hasta decir no más.

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    Hasta “Don Colchón”, de los almacenes El Campeón, vivió la tanda.

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    DJ Tavo y Lea animaron al público con los famosos coritos.

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    Uno de los que no se perdió la tanda del recuerdo fue Cat Boy.

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    Jampier y dj Chino tiraron plenas hasta decir no más.

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    Uno de los que no se perdió la tanda del recuerdo fue Cat Boy.

Marlene González - DIAaDIA

Como dirían los que saben de plena de verdad: ¡Qué “tandota”!

Amigos, les cuento que la sala de eventos Latitud 47 reunió a los conocedores de reggae de los 80 y 90, con una tanda retro, en la que quienes estuvieron en el lugar revivieron los mejores momentos de la música, y las letras con violencia no eran parte de este repertorio.

Los encargados de “prender el rancho” con cada melodía fueron dj Tavo, Lea, Chino, Jampier y los chicos de la Black Community, quienes de sus maletines sacaron los mejores pregones.

Bueno, y como ustedes saben, cuando una canción es buena y el público quiere que el dj la repita gritan: “Ey, ey, ey, ey”, así que esta frase se escuchaba cada cinco minutos.

El motivo de esta tanda retro, además de hacer que la gente recordara sus buenos tiempos, también traía artistas, y los encargados de hacer revivir esos años fueron los jamaiquinos Daddy Lizard y Flourgon. Este último venía acompañado de su hermano Red Dragon, quien no pudo pisar suelo panameño debido a que hace unos días su madre falleció y decidieron que Flourgon representara la vieja guardia.

 
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