A veces me pregunto si perd� mi tiempo en tercer a�o, cuando la profesora Cielo de Tatis me imparti� la clase de mecanograf�a.
Recuerdo que era imperioso aprenderse el teclado gu�a. Para ello, nos tapaban las teclas de las m�quinas de escribir Olimpia y las Underwood. No hab�a manera de hacer trampa.
ASDF - JKL� eran las gu�as. De ah� en adelante, m�s val�a que uno se aprendiera cu�les iban arriba, abajo, a los lados; d�nde estaba la may�scula y los benditos n�meros.
No conformes con eso, nos ten�amos que aprender el teclado de los n�meros en las sumadoras. Yo me aprend� todo eso y soy r�pida escribiendo en la computadora, tanto como lo fui en las m�quinas de escribir. Nunca veo el teclado, de lo contrario me enredo.
No obstante, ahora me siento como una tonta cuando veo a mis hijos chateando en el blackBerry... &162;sin ver el teclado! Yo los estoy rega�ando y ellos me est�n mirando f�jamente, pero en realidad est�n escribiendo a la velocidad del rayo, dici�ndoles a sus amigos que les estoy amargando el d�a con mis sermones.
Para colmo, ahora los n�meros tambi�n est�n en el teclado de las computadoras que, adem�s tienen calculadoras, y para hacerme sentir m�s tonta, ahora el uno est� abajo y el nueve arriba. Todo lo aprendido me parece un fraude, pero no me dejo. Todo lo nuevo que sale, trato de aprenderlo. Eso s�, muchas veces tengo que acudir a mis hijos para que me expliquen hasta el funcionamiento del control remoto de la televisi�n o del DVD. &162;Habr�se visto! Bueno, es el juego de la vida, y si no se juega, quedamos en la banca, estancados.