Su hijo necesita una silla de ruedas. Agripina Rodríguez tiene 72 años, y vive en extrema pobreza junto a su hijo Alexis, quien necesita con urgencia una silla de ruedas, pues sufrió un accidente que lo ha dejado paralítico.

La señora Agripina ha mostrado su amor por Alexis, que a pesar de ser humilde solicitó la ayuda de la Defensoría del Pueblo, pues la silla de ruedas que tenía ya está deteriorada.

Ávila sufrió un accidente en una lancha en el sector de Donoso de Colón, y quedó en silla de ruedas porque no puede movilizarse de una mano y pierna, mientras que la otra se le dificulta su movimiento.

La señora Rodríguez señala que la pobreza en la que viven ambos le impide a su hijo asistir a las terapias que por su condición debe recibir; aunado a esto la actual silla de rueda que usa se encuentra en malas condiciones.

"Nosotros sólo recibimos ayuda de una hija, pero ella vive muy lejos de nosotros; la silla de rueda de mi hijo no sirve, le tenemos que poner unas tablas para que no se cierre", afirmó la señora Rodríguez.

La Defensoría del Pueblo en Coclé realizó una gira al sector de Tambo en la residencia de esta familia, y se percató de la dura situación en la que viven, por lo que se comprometieron a realizar las gestiones necesarias ante las autoridades sociales y organizaciones sin fines de lucro para otorgarles la tan anhelada silla de ruedas.

De igual forma, le dan seguimiento al proceso legal que se lleva por el accidente en el que salió lesionado el señor Ávila.

La señora Agripina recordó además que ellos necesitan mucha ayuda, y pide al Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) que la incluyan en la Red de Oportunidades o en los 100 para los de 70.