Yo creo que el BlackBerry es una gran herramienta de trabajo. Periodísticamente hablando, es una maravilla porque te permite estar 'up date' con casi todo lo que pasa en el mundo, recibir datos y documentos importantes que, se supone, deben servirte para entregarle a tu audiencia un mejor producto, pero también hay que saber usarlo, sobre todo cuando, profesionalmente, se tienen que respetar las reglas de hacer televisión.
Y es que, cuando en televisión se invita a alguien para ser entrevistado, lo mínimo que se le tiene que dar a esa persona es respeto a su tiempo. Atenderle como se merece, o sea, ponerle atención y así lograr que la entrevista se vea y sea completa.
Yo no sé si usted lo ha notado, pero yo sí. ¡Que irrespetuosos que son, con sus invitados, ciertos presentadores matutinos! En las supuestas entrevistas, los entrevistados hablan y hablan y los presentadores 'chatean y chatean' con lo que yo creo se les ha convertido en un 'crackberry': en una droga tecnológica. Es tan desagradable y hasta poco profesional, no respetar a los invitados que no sé cómo, algunos, no se han parado e ido del "set", sin embargo, cuando entrevistan al Presidente de la República, hasta el celular debajo del muslo se colocan. Un entrevistado, ya sea ministro, la señora de las chichas o el señor al que, en pantalla, le explotan su dolor, merece el mismo respeto en la entrevista -por parte del presentador- que le dan al señor Presidente.
Esta desagradable e irrespetuosa "moda" del celular en mano y al aire, la instauró, en su momento, Lucy Molinar. Sintonice hoy, al señor Álvaro Alvarado en Telemetro Reporta Matutino y verá como él está más pendiente del celular que del entrevistado. Vea a Alexandra Ciniglio, y ahora, a Siria Miranda de TVN Noticias AM y verá exactamente lo mismo. Estoy seguro que lo justificarán diciendo que con eso solucionan y logran información "exclusiva" que les llega directo al celular.
En un "morning show" o en un noticiario serio esto no pasa porque los teléfonos están en manos del equipo de producción que va recogiendo los "nuevos datos" y pasándoselos a los presentadores, luego de confirmar, para no caer en inexactitudes. Aquí quieren imitar la televisión de Miami o la mexicana para algunas cosas -casi siempre las peores-. Usted no ve a ninguno de los presentadores, de ningún noticiario de los que aquí les gusta imitar, ni con su celular en la mano y mucho menos, en medio de una entrevista, los ve chatear, por muy periodística que sea la 'chateadera'. Esto, aquí y en Sudáfrica, no sólo es mala educación y falta de respeto, sino un abuso y pésimo mensaje a la audiencia, que espera del entrevistador un trabajo profesional y una entrevista correcta en la que él esté concentrado en el tema y no chateando en pantalla.
Otra cosa, y sin ánimos de demeritar a Siria Miranda, ¡qué bueno es ver el noticiario estelar de TVN con María Elena Barrios! Yo no conozco a la señora Barrios, pero reitero, ella sí sabe hacer su trabajo. Transmite seriedad, madurez, responsabilidad, buena presencia y perfecta dicción. Se limita a hacer el trabajo de un "anchor". ¡Punto! Todos los que la acompañan son "equis". Ella los opaca totalmente sin enseñar nada, sin cantaditos absurdos, sin movimientos corporales influyentes y sí con una presencia que transmite profesionalismo. Eso las audiencias lo agradecen. ¡Bravo!
