Un trabajo muy difícil. En su estadía en Panamá, la reliquia de Don Bosco fue cuidada celosamente por unos hombres que pasaron inadvertidos entre los devotos del santo de la juventud.

Ellos eran los encargados de mover la urna donde reposaba la reliquia de Don Bosco y estaban pendientes si llovía, hacía mucho sol o dónde sería colocada.

El padre salesiano Luis Carías, encargado de la logística en Panamá, explicó que estos señores trabajan para una compañía italiana llamada Bertolli y Cía.

Los responsables de la logística de la reliquia, fueron: Roberto Bertoli y Pazientte, de éste no recordó el nombre. Ellos se marcharon antes para Costa Rica y Nicaragua a preparar la llegada de Don Bosco a esos países. En la logística también colabora: Misiones Don Bosco de Turín.

La reliquia ya recorrió todo Sudamérica y en Venezuela el presidente Hugo Chávez exigió un certificado de defunción de Don Bosco para poder dar el permiso de entrada al país de la reliquia. Al estar confeccionada de cera, la reliquia no puede estar expuesta al sol por más de 90 minutos, porque sufriría daños, además la vestimenta y los zapatos que tiene puesto la reliquia fueron usadas por San Juan Bosco.

Los encargados en trasladar la estatua de Don Bosco ayer fueron el brasileño Sergio Sato, encargado de la logística para toda América Latina y Carlo Ruini para todo el mundo.

RECORRIDO

La reliquia recorrerá 122 países en tres años y luego regresará a Turín, Italia.