
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZLEZ .
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZLEZ .
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZLEZ .
Madre e hija fueron enterradas una al lado de la otra.
Familiares y amigos le llevaron flores a su última morada.
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZÁLEZ .
Madre e hija fueron enterradas una al lado de la otra.
Familiares y amigos le llevaron flores a su última morada.
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZÁLEZ .
Madre e hija fueron enterradas una al lado de la otra.
Familiares y amigos le llevaron flores a su última morada.
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZÁLEZ .
Madre e hija fueron enterradas una al lado de la otra.
Familiares y amigos le llevaron flores a su última morada.
Fue un sepelio de mucho dolor, ya que ella era una dirigente de la comunidad.
Fotos: HERMES GONZÁLEZ .
Madre e hija fueron enterradas una al lado de la otra.
Familiares y amigos le llevaron flores a su última morada.
En medio de lágrimas y desmayos se llevó a cabo el funeral de madre e hija, quienes fallecieron en San Francisco de Pacora, el domingo pasado mientras estaban en una parada. Ese día un conductor de un vehículo, que iba a excesiva velocidad, se salió de la vía y las arrolló.
Eneida murió en el lugar y su pequeña Marelis falleció en el hospital.
La otra niña de 12 años se mantiene hospitalizada.
Familiares y amigos solicitaron a las autoridades que se haga justicia por este caso, ya que, según la tía de la víctima, Felina de Barrios, el conductor del vehículo que le quitó la vida a sus sobrinas a la hora de salir del hospital amenazó a algunos familiares diciendo que no sabían con quién se habían metido.
El sacerdote Franco Brenes, en su homilía, le dio ánimos a la familia diciendo que aunque el cuerpo muera siempre quedará el espíritu y que existe una justicia divina de la cual no se escapa nadie.