Fue una canallada. Gregoria De León, de 73 años, al terminar de llenar la ficha técnica para ser beneficiaria del programa 100 a los 70, se sintió muy contenta, porque al menos tendrá una plata segura todos los meses.

Acompañada de su hermano Eriberto De León, ella contó que trabajó por más de 13 años en un restaurante en donde le descontaban la cuota de Seguro Social, pero nunca se pudo jubilar.

Manifestó que esto se debió a que su jefe nunca pagó a la CSS el dinero que le descontaba, por lo que ahora sufre las consecuencias de no tener una pensión.

Por si fuera poco, la triste historia del no pago de la cuota se repitió con su esposo Leonidas Montenegro, quien trabajó por cuatro años en una empresa de seguridad.

Lo lamentable es que se enteró de que su pareja no tenía derecho a los beneficios del Seguro después de que lo mataron en 1989, cuando cumplía con su deber. Sin embargo, cuando fue a cobrar la pensión de viuda, le comunicaron que él no tenía cuotas pagas.

Ante estas malas prácticas de algunas compañías, la anciana le pide al Presidente que las castigue con todo el peso de la ley, porque le hacen un gran daño a las personas.