Testimonio de vida. "Cuando estaba perdido en una pandilla, conocí a un pastor quien me llevó una palabra de esperanza, cuando yo no servía para nada", en medio de las lágrimas Erick Chabriel Morales, de 18 años, relató cómo con la ayuda del pastor Herminio Rivera logró salir del oscuro mundo de las pandillas.

Todo el mundo le hablaba de un pastor, quien daba la vida por los jóvenes, pero él en su mundo, no quería saber de nada de eso, hasta que un día, ese hombre llegó y aunque en su corazón decía que no había esperanza de cambio en su vida, asegurando que él había nacido para morir, el pastor Herminio le devolvió la esperanza.

De eso ya han pasado cinco años, ahora, con su amiga inseparable, la Biblia, "Chaby", como le dicen, da testimonio de que quien puede se levanta para ser un hombre de Dios. Ahora disfruta de la paz en su corazón por el amor de Dios y de su bebé de siete meses, quien ilumina más su vida y la de su esposa.

"El pastor Herminio ha sido una bendición para mi vida, nos demostró que era necesario morir por las almas y entregar nuestra vida por las personas que piensan que ya no tienen esperanza".

La conversación con Chaby se hizo dentro del templo Ejército de Paz donde el pastor Rivera solía hacer sus cultos. A ese templo muchos asistieron ayer para recordarlo, ese que estaba siendo ampliado para recibir a más personas e incluso para crear un comedor infantil, pero fue una iniciativa truncada con su muerte.

DESPEDIDA

Se espera que las honras fúnebres del pastor Herminio sean mañana a las 11:00 a.m. en el Cementerio Amador.