GENTE COMO YO

Joven negociante


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Es un ejemplo para la juventud.

FOTOS: ROBERTO BARRIOS

  •  Joven negociante

    Es un ejemplo para la juventud.

    FOTOS: ROBERTO BARRIOS

  •  Joven negociante

    Una sonrisa para sus clientes.

  •  Joven negociante

    La chicha les quita el calor.

  •  Joven negociante

    Los clientes llegan por montones.

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    La chicha les quita el calor.

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Yanelis Domínguez - DIAaDIA

La esperanza en el mañana. Ser extranjero no ha sido impedimento para que Julio Rivas salga a las calles a venderles comida a los panameños.

Este joven negociante llegó a Panamá, gracias a unos familiares, y desde el primer día que puso los pies en el país, se dijo: “Voy a ser mi propio jefe y tendré futuro”. Lo que poco a poco ha conseguido, pues es dueño de un pequeño negocio ambulante de venta de chichas y empanadas.

Su día no amanece con el sol, ya que se levanta a las 3:00 a.m., cuando da inicio a la preparación de la chicha y a acomodar las empanadas en los ‘coolers’.

Paciencia de empresario

Son muchas las exigencias que los consumidores le exponen a Rivas, pues si no es que la chicha está muy dulce, que le falta azúcar o simplemente se quejan de los precios, pero aún así sigue siendo el preferido de los trabajadores del metro de Panamá, pues él se ubica frente a la planta de las dovelas, en la vía Centenario.

Los días más provechosos para él son los de pago, pues sus clientes se dan gusto, hasta repiten la dosis de alimento. Tanto así que a las 12:00 mediodía ya no tiene nada en su carro.

Por el momento, usa un busito alquilado, pero las ganancias son tan buenas que le alcanzan para eso y satisfacer todas sus necesidades.

Sus sueños

Colocar diversos puestos de ventas ambulantes, es el futuro que según Rivas le espera y el que no abandonará hasta el día que cierre sus ojos.

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