Muchas madres han vivido en carne propia la terrible agonía de ver a sus hijos que se caen y se golpean la cabeza. Bueno, es sabido que las preocupaciones surgen a raíz de que las repercusiones de este accidente pueden ser serias.

Según los expertos, no todas las contusiones en la cabeza hacen algún daño permanente o parcial en el cerebro del niño. Esas caídas nunca son graves. Lo que sí es de cuidado es cuando el niño sufre un gran golpe seguido de otro antes de seis meses.

Si después de una caída, su hijo vomita más de dos veces, se queja de mareos, tiene la vista nublada, se siente débil y con dolor de cabeza, no dude en llevarlo inmediatamente al médico para que lo examine.