Fue un intento frustrado. Quince ecuatorianos ingresaron ilegalmente a Panamá con destino a Norteamérica y fueron abandonados ayer en un hotel de la localidad. Cada uno llevaba consigo una pequeña mochila con mudas de ropa para dos días y sin dinero.

Javier Tapia, subdirector de Migración, indicó que estos ecuatorianos iban rumbo a Estados Unidos, vía terrestre, y fueron detenidos por los inspectores.

Tapia recalcó que Panamá ha sido muy duro con el tráfico internacional de personas, y señaló que "no podemos dejar que Panamá sea un puente de seres humanos, quienes ponen en riesgo hasta su propia vida".