La rumba fue en grande; pero esta vez, el tamborito le dio paso al popular ritmo del Caribe colombiano, de origen africano: la "champeta".

Este ritmo, que se ejecuta con la batería, guitarras eléctricas, bajo, congas y sintetizador, fue cantado ayer a capela por los niños colombianos en el estadio Felipe Motta, luego que derrotaran a Panamá A (Chiriquí), 8 carreras por 0.

Sin lugar a dudas, su artista principal en el baile y canto fue Rafael Castro, quien sacudió un bambinazo de vuelta completa con dos a bordo en la parte baja de la tercera entrada, el cual guió a Colombia a su segundo triunfo en dos salidas en el XXXVIII Campeonato Latinoamericano de Béisbol Infantil.

Se repite la historia

Como dice el viejo y popular refrán: "No es quién la hace, sino quién la paga".

Panamá B (Panamá Metro) vio por primera vez la luz en el torneo, al dejar tendido en el terreno a Ecuador 2 carreras por 1.

El héroe de la tarde fue Christian Bethancourt, al pegar el imparable de oro, el cual trajo a la casa desde la intermedia a José Murillo IV.

Por Ecuador destacó a la ofensiva Andrés Cedeño, con un vuelacercas.

Rafael Castro terminó el juego con dos imparables en dos turnos, con dos carreras anotadas y cuatro empujadas.