Moradores y transportistas que utilizan la vía hacia las comunidades de Mendoza y La Represa, en el distrito de La Chorrera, están preocupados por la calle que ha sido destruida por la empresa que construye la planta potabilizadora.
En reiteradas ocasiones las autoridades del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales han asegurado que la compañía "deberá reparar la calle una vez termine la obra".
Los residentes han destacado que su preocupación se fundamenta en que la empresa, en vez de tapar los baches con piedra, como corresponde, lo hace con tierra, causando un lodazal cada vez que llueve.