Fiebres peligrosas

Una madre que ha pasado muchas veces por este tipo de problemas es la joven Nedelka Ramos, quien tiene una niña de dos años que ha sufrido más de tres convulsiones febriles, lo que es muy peligroso.

Para Nedelka ha sido una situación difícil, ya que en muchas ocasiones los doctores le dicen que es algo normal en los niños, pero ella ha visto que el comportamiento de su bebé no es el mismo.

“Luego de las convulsiones que ha tenido mi hija, las referencias que me han hecho al neurólogo son muy tardías, casi dos meses después de la convulsión, lo que me preocupa mucho”, expresó Nedelka.

Para la pediatra Isis Castillo, es muy importante que luego de una convulsión exista una atención que no tarde más de una semana para neurología, ya que es donde se observa directamente el problema y se comienza el tratamiento necesario.

Castillo recomienda que siempre mantengan acetaminofén para la fiebre y que en caso de que el niño convulsione, bañarlo no más de 20 minutos con agua preferiblemente a temperatura ambiente y luego llevarlo al hospital más cercano.