Tiene aspiraciones de artista y quiere crecer a la par de otros jóvenes, principalmente aquellos que han hecho de las calles "la escuela de la vida".
Julio César Aguilar, de 21 años, considera que esta población marginada por muchos conciudadanos merece una oportunidad.
Está convencido de que en los chicos de la calle hay mucha creatividad, y asume que hay que ocupar sus mentes en cosas positivas.
Es por eso que colabora como mentor en el Club House Fe y Alegría en el Ingenio, donde se congrega gran cantidad de estos jóvenes, a quienes se les dan las herramientas básicas para formarse un futuro, en cuanto a música se refiere.
Aguilar comentó que él es mentor de estos jóvenes; es decir, escucha las letras de los futuros artistas y hace algunos arreglos, además, les da sugerencias. Afirmó que así mismo, los que tienen más experiencias que él también le ayudan.
De su vida, comentó que es marino de Aguas Internacionales y le gusta la música, razón por la cual quiere ayudar a que otros jóvenes se superen como artistas.
Aspira grabar el primer CD de los niños y jóvenes que aprenden en el Club House, donde las temáticas son suaves, a ritmo electrónico y comercial, pero sobretodo sin violencia.
También sueña con ser escuchado en los países latinoamericanos y surgir poco a poco en el mundo artístico, para orgullo propio y de todos sus familiares.
Aguilar manifestó que reside en calle 13, Ciudad Radial, en el corregimiento de Juan Díaz, y señaló que él ha vivido en carne propia esa experiencia de la calle, "sé lo que es el sufrimiento, todos somos pobres y quiero ayudarlos", destacó.
Lamenta que muchos jóvenes tomen el camino de la perdición, si hay muchas formas de afrontar la vida con dignidad y honradez.
|