Si no pagaban, no podían retirar a sus hijos. (Foto: MIGUEL ÁNGEL CAVALLI / EPASA)
Milagros Murillo F.
| DIAaDIA
Tanda de chiquillos. Fuera de la estación policial de San Cristóbal estaba la señora Josefina, quien desde la noche del lunes, intentaba sacar a su hija de 15 años, luego de que ésta fuera una de las 86 retenidas producto del "toque de queda" que empezó a regir el lunes.
La jovencita había salido de su casa, ubicada en San Miguel, junto a una prima (mayor de edad, pero sin cédula), para ir a comprar una pesada de nance, pero en el camino se las llevó la "batida".
Junto a Josefina estaba su hermana, quien molesta le decía: "si no le pegas tú, le doy yo, porque el domingo se le dijo lo que pasaría". Sin embargo, la jovencita, que está de vacaciones porque con esfuerzo su madre la matriculó en una escuela privada, adujo que no sabía que se la podían llevar.
NI SIQUIERA AGUA
La quinceañera, junto a otras seis menores de edad, denunciaron el maltrato que les dieron desde que las retuvieron. "Nos mandaron a bajar el panti, nos abrieron el brassier y nos pusieron a saltar encuero", aseguraron.
Otro caso fue el de una señora que dijo que aunque su hija estaba con ella, también se la llevaron en la ronda.
Además, denunciaron que una de las menores de edad, que estaba embarazada, empezó a sangrar, por lo que fue llevada al Hospital Santo Tomás con amenaza de aborto.
NO HAY PLATA
Josefina tuvo que pedir prestado B/50.00 para sacar a su hija de la Policía, pues trabaja en casa de familia y no tenía dinero. Y es que hay padres que aseguraron que era mucha plata.
Lo peor de todo fue que los menores de edad que no fueron retirados por sus padres o adulto responsable, pasaron a un albergue del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES). Según explicó Virginia Castillero, coordinadora del Centro de Orientación y Atención Integral (COAI), a todos los jóvenes se les dará un seguimiento con personal especializado.
NADA DE VIOLENCIA
La psicóloga dijo que hay padres que descargan su enojo por lo sucedido con los hijos, pero aunque deben tomar medidas disciplinarias, no tienen que caer en conductas violentas, pues más que golpear, es mejor conversar con ellos para buscar una solución a sus problemas de conducta.
Manifestó que los que tienen alguna denuncia sobre el trato deben acercarse a formalizarla en la Policía Nacional.
ESCARMIENTO
Lo cierto es que, por lo menos, la hija de doña Josefina admitió que lo que le sucedió fue un escarmiento y que no saldrá de su casa a altas horas de la noche.
EN CIFRAS
Ciudad capital: 26 Colón: 35 Herrera: 6 Bocas del Toro: 4 Veraguas: 3 Coclé: 3 Los Santos: 3 La Chorrera: 3 San Miguelito: 2 Chiriquí: 1