¡Buajajaja! Este es un cuento de la cripta. Kate Moss siente que desde algún tiempo las cosas en su vida andan manga por hombro y que eso no es por pura casualidad.
La top model asegura que pasan cosas raras en la lujosa mansión que comparte con su esposo el roquero Jamie Hince y su hija Grace Lila, en Londres .
Por tal razón contrataron a un exorcista, porque consideran que su "chanting" está hechizada.
"Jamie es supersticioso y cree en lo sobrenatural y la ha convencido de que hay un ente paranormal en la casa que necesariamente tiene que ser eliminado por un sacerdote chamán", dijo una fuente anónima al diario británico The Sun.
La idea de traer al exorcista es para limpiar su casa de malas energías, porque ha sido robada, ha tenido inundaciones, entre otras cositas.
"La convenció su esposo Jamie Hince, que cree en lo sobrenatural", revela una fuente al rotativo. ¡Bueno, a comprar incienso y rompesaragüey!