
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Las pastillas es lo que más compran.
Luis Enrique vende también.
Hay de muchos sabores.
EL puestito está ubicado en Santa Ana.
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Las pastillas es lo que más compran.
Luis Enrique vende también.
Hay de muchos sabores.
EL puestito está ubicado en Santa Ana.
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Las pastillas es lo que más compran.
Luis Enrique vende también.
Hay de muchos sabores.
EL puestito está ubicado en Santa Ana.
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Las pastillas es lo que más compran.
Luis Enrique vende también.
Hay de muchos sabores.
EL puestito está ubicado en Santa Ana.
El sr. Manuel admite que duerme poco, pero es muy responsable en su trabajo.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Las pastillas es lo que más compran.
Luis Enrique vende también.
Hay de muchos sabores.
EL puestito está ubicado en Santa Ana.
Él es dueño de un puesto de buhonerías ubicado en Santa Ana, justo al lado del restaurante Pío Pío, lugar donde, desde hace diez años, se dedica a vender “gracias a Dios hasta el sol de hoy”.
A pesar de que en tiempo de lluvia las ventas bajan, las personas siempre acuden a su puesto. Generalmente a comprar pastillas en horas de la mañana. Manuel también ofrece: toallitas, gomas, prestobarbas y hasta cigarrillos, entre otras cosas, que siempre le caen bien a quienes van pasando por ese lugar.
Desde las 6:00 a.m., el puesto empieza a funcionar y depende de cómo estén las ventas y el clima se cierra, aunque hasta debajo de la lluvia acuden los compradores.
No hay duda de que González es muy trabajador, y es que, en las noches trabaja como guardia de seguridad. “Hay que buscar el dinero porque se tiene que pagar muchas cosas”, aseguró el señor quien explicó que siempre ha contado con el apoyo de Luis Enrique Escudero quien, cuando él no está ,se hace cargo del negocio.