Tal vez usted es una de las chicas que está aburrida de los mismos consejos sobre la ropa interior: no use esa, póngase aquélla, regale la otra y más. Pero lo que en verdad quiere saber es cuál le quedaría perfecta para seducir a su pareja.

Bueno, amiga lectora, no se estrese más, porque hoy le daremos unos datos que deberá poner en práctica para conquistar no sólo el corazón de su amado, sino también sus ojos.

Empezaré por decirle que la seducción es un arte que no sólo se limita al maquillaje, peinado, a los movimientos y gestos, también está presente en la ropa interior femenina.

Negros, rojos, rosas, amarillos, en fin, cada color dice algo distinto de usted. ¡Averígüelo y aprenda a sorprender a su pareja!

Tiene que recordar siempre que su ropa interior dice mucho de usted y por eso, desde hoy, no volverá a comprarla toda del mismo color. Y es que aunque es cierto que la ropa íntima es muy personal, usted debe elegir cómo quiere que sea en función de lo que más le gusta y dependiendo de la ocasión.

Debe tener en cuenta cómo es su cuerpo, su color de piel, etc. para tomar una decisión acertada.

CONSEJOS:

• Tiene que saber que puede jugar mucho con su ropa íntima. Si elige, por ejemplo, colores como el rosa y blanco, se convierten en una prenda "inocente", aunque al mismo tiempo provocativa. Estos colores potencian la imagen de niña buena.

• Por el contrario, si quiere transmitir "pasión y seducción", debe elegir una lencería en tonos rojos. ¡Les encanta!, y si a eso le añade unos encajes o transparencias, no tendrá escapatoria.

• El más sexy por excelencia es el negro, da lujo y sofisticación a su piel. Pero si de verdad quiere que caiga rendido a sus pies, opte por un conjunto de lo más agresivo.

• Los estampados felinos son sólo aptos para chicas atrevidas que se atreven con todo, pero también puede ser una de ellas por una noche.

• Una faceta más juvenil la dan los colores vivos: azules, verdes, amarillos. Esos colores también resaltan el moreno de su piel. Elija su color para cada ocasión y haga que se derritan buscando sus encantos.