A Andrés le encantan las chicas latinas, muy al estilo Jennifer López y Salma Hayek.
Diamar Díaz Nieto
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Cuando pensaba que tenía todas las respuestas, la vida le cambió las preguntas, ya que todo su mundo varió. Andrés Morales nunca pensó en formar parte de uno de los programas de culto de la televisión panameña, como lo es La Cáscara, y que, de paso, se le abrirían los caminos para diversos proyectos, entre ellos: Muévelo.
Con tan sólo 25 años, este joven considera que existen muchas cosas importantes en su vida; no obstante, su familia es la brújula que lo conduce y que le permite mantener los pies bien puestos sobre la tierra.
CAMBIA DE RUMBO
A pesar de su juventud, este chico ha tenido diversos cambios en su vida, pero nada de eso le mueve el piso. Andrés cuenta que nunca pensó llegar a la televisión, pues la carrera que estudió fue turismo. Quizás su espíritu travieso y sus dotes para personificar fueron las que hicieron que un amigo suyo, de nombre Alfredo, lo mencionara en una amena charla que mantenía con Rafael Gallardo (maestro Zezinho), quien luego lo presentó a Davis y a toda la comitiva cascarosa.
Lo demás ya lo sabemos. Diversas apariciones en cámara en segmentos como 'Pague por Sufrir' y como 'El colombiano de Betito Bacala'o', segmentos que lo catapultaron a la fama.
A lo largo de esta experiencia, ha tenido la oportunidad de viajar a Nueva York, Los Ángeles y Miami. Pero la vida le tenía deparada otras sorpresas.
Fue llamado para participar en el "casting" para ser el presentador de Muévelo, proyecto del que se siente orgulloso de participar.
SU MADRE, SU JOYA
A lo largo de la conversación, nos dimos cuenta que su principal amor es su familia, pero no puede negar que su madre es el ser que le ha dado la hoja de ruta de su vida, ya que sus consejos siempre han sido acertados.
"Mi mamá siempre trató de inculcarme una cultura, así, muy al estilo Frank Sinatra: saber ser cortés, saber cómo dirigirme a la gente, ser muy honesto, amable", aseguró.
Con sus hermanas Raquel y Michelle, destacó que siempre las ha querido y que a la más pequeña la cuida más, precisamente por su juventud.
De su padre le gusta su sabiduría, "es como un maestro Jedi", dijo entre risas.
SOBRE EL AMOR Y OTRAS NOSTALGIAS
En el corazón de Andrés también hay añoranzas de historias viejas de amor y, aunque no menciona nombres, porque los caballeros no tienen memoria, sí recuerda algo que le dejó huellas indelebles por la trascendencia que tuvo.
El joven destacó que uno de los detalles que más atesora de una de sus novias es cuando se hizo sus primeros tatuajes debajo del brazo. Rememoró que su novia de esos años lo acompañó para grabarse su nombre y la frase espíritu completo. "El hecho de que haya sido con ella, compartir ese momento, para mí fue muy especial, porque viví ese momento con ella". ¡Ay, qué sentimental!
COLECCIONISTA
Desde chico, comenta Andrés, ha sido fanático de Supermán y de Flash. Nos dijo: "Desde pequeño he coleccionado los cómics, tengo alrededor de 500 en mi casa de diferentes personajes, que me gustaban desde chico".
Afirma, jocosamente el presentador, que tiene en su casa todos los juguetes de niños, entre ellos Star War y los Ninja Turtle, por si algún día llegan a valer más dinero o si no, puntualiza, para dárselo a los hijos que en el futuro pueda tener.
CREE EN EL DESTINO
Aunque su apariencia es de un joven descomplicado, dentro de este chico hay un espíritu reflexivo.
Andrés considera que existe el destino, ya que nunca pensó trabajar en la TV o ser presentador de un programa; sin embargo, puntualizó que tal vez lo que le que ha sucedido quizás formaba parte de un plan mayor que él. "Las bendiciones que tomamos nos ayudan a construir un camino. Creo que el destino tiene mucho que ver con todo lo que me ha pasado".
El cascaroso concluye esta entrevista con una frase que ha marcado su vida y que la dijo Frank Sinatra: "Lo mejor está por venir", y por lo que vemos tendremos a un Andrés creativo y dando de qué hablar en la televisión panameña.