Un maestro en el cuidado de las plantas

Para una persona, este proceso puede llegar a ser un tanto aburrido, pero para Alfonso Camarena esto representa una gran tranquilidad. Él, a su 72 años, es dueño de un pequeño puesto en donde vende plantas y abono, pero más que un negocio esto representa una forma de vida la cual goza a cada segundo.

Enamorado del medioambiente

Acostado en una hamaca y sin perder de vista sus plantas, Camarena recordaba su infancia en los potreros de Calobre, en Veraguas, su tierra natal. Allí, desde muy pequeño, trabajaba la tierra y aprendía técnicas de cultivo que poco a poco fueron reforzándose. De esta manera se dedicó toda una vida a la agricultura, llevando por medio de esta actividad el sustento a su casa donde residía con su esposa y ocho hijos, que ya son unos profesionales.

Añoranza

Hace solo cuatro años, este humilde hombre se trasladó a la ciudad a montar su puesto, el cual está ubicado en Milla 8, pero asegura que extraña el verdor de los pastizales de su amada Veraguas y la paz de sus alrededores.

Incansable

Desde las 9:30 a.m. hasta las 5:30 p.m.,se puede observar a Alfonso vendiendo sus matitas. Al llegar a su aposento, con una sonrisa y muy jocosos chistes, atiende a la clientela ganándose el corazón de todos.

Le pide a Dios fortaleza para seguir trabajando, ya que no quiere depender de nadie; asegura sentirse un hombre fuerte que necesita seguir laborando para sentirse activo. Tanto así, que trabaja de lunes a domingo y solo falta cuando hace “camarones” de limpieza y cuidado de jardín.