
David Saladino (izquierda), Irving Saladino y Cristina de Saladino, madre.
Foto: Archivo
David Saladino (izquierda), Irving Saladino y Cristina de Saladino, madre.
Foto: Archivo
David Saladino (izquierda), Irving Saladino y Cristina de Saladino, madre.
Foto: Archivo
David Saladino (izquierda), Irving Saladino y Cristina de Saladino, madre.
Foto: Archivo
David Saladino (izquierda), Irving Saladino y Cristina de Saladino, madre.
Foto: Archivo
Como todos sabemos, Saladino es una de las últimas cartas que tiene Panamá en cuanto a medalla se refiere en estos Juegos Olímpicos.
La espera ha sido larga, pero hoy podremos saber si Saladino podrá optar por una de las tres preseas.
Miles de panameños, pegados a la pantalla de los televisores, esperarán con ansias este momento. Y cuando el reloj marque la una y cincuenta de la tarde, el país entero se detendrá al ver al “canguro colonense” entrar en acción.
Panamá entero espera revivir nuevamente el momento de gloria que logró Irving en las Olimpiadas de Beijing 2008.
La familia de Irving
“Estamos tranquilos, bien relajados. Hemos conversado con él (Irving) y, está bien. Si él está bien, nosotros estamos bien”, expresó a DIAaDIA muy emocionado David Saladino, padre de Irving.
Para el Sr. David, las emociones de aquellos Juegos Olímpicos de Beiging 2008 en comparación con las actuales Olimpiadas, “se asemejan un poco”, aunque reconoció que la familia vivió más nerviosismo en las primeras mencionadas.
“Todos estamos confiados de que va a salir airoso en su competencia. Él va a volver a traer esa medalla para Panamá, pues Irving está muy optimista”, agregó el padre del saltador olímpico.
Preocupación
Pero ante toda esta presión olímpica por la que vive la familia Saladino, también hay algo que le preocupa: el acercamiento a la tabla.
“Lo único que nos preocupa es la cuestión del acercamiento de la tabla, pero su entrenador (Florencio Aguilar) nos ha dicho que ya han trabajado en eso. Esperemos que todo salga bien”, indicó David Saladino, padre del atleta panameño.
El señor David también dijo que para ellos como familia sería un orgullo grandísimo que un Saladino (apellido), traiga otra medalla olímpica para Panamá. Aunado a ello, el progenitor del icono del deporte panameño fue muy enfático al asegurar que si las cosas no salen como se esperaban para ellos, la figura de su hijo no cambiará en lo absoluto.