Ja, ja, ja, Thalía piensa que por ser famosa la gente le tiene que creer todo.

Ahora resulta que le va mal con el supuesto cuento de que le robaron sus joyas en el hotel Marriot de Roma, pues la policía alega que es difícil creerle a los esposos Mottola. "Las circunstancias que rodean el robo son misteriosas. La puerta de la suite no fue forzada y los guardias de seguridad no vieron personas extrañas deambulando por los pasillos del hotel", dijo un oficial.

Además, fuentes cercanas a la investigación sostienen que la cantante pudo exagerar en el costo de las joyas robadas. La pareja dice que las joyas estaban en una bolsa de cosméticos encima de una mesita, lo que pone a las autoridades a pensar, ya que sostienen que en el hotel hasta cajas fuertes tiene cada habitación; por eso, todo parece extraño. Por el momento, no hay sospechosos. ¡Qué feo!