Los ganglios linfáticos son una de las glándulas más importantes en la defensa contra las infecciones. A través de este sistema, fluye el linfa, líquido transparente y espeso que transporta células sanguíneas que luchan contra infecciones y enfermedades.

¿POR QUE SE INFLAMAN?

La inflamación puede ser producto de una infección, condiciones inflamatorias, un absceso o cáncer. Existen otras causas de agrandamiento de éstos ganglios; sin embargo, éstas son extremadamente raras.

Entre las infecciones que comúnmente causan inflamación se encuentran la mononucleosis, rubeola, paperas, infecciones del oído, amigdalitis, abscesos dentales, gingivitis (inflamación de las encías), úlceras bucales y las enfermedades de transmisión sexual.

¿DONDE SALEN?

Las áreas más comunes donde se pueden sentir son:

• El área de la ingle.

• Axila.

• Cuello.

• Mandíbula y barbilla.

• Detrás de los oídos.

• Sobre la parte posterior de la cabeza.

CUIDADOS EN EL HOGAR

Generalmente, el tratamiento se centra en la cura o mejoría de la causa que lo produce, ya sea una infección en los oídos o un absceso.

El dolor en los ganglios linfáticos generalmente desaparece en un par de días sin tratamiento, pero es posible que éstos no retornen a su tamaño normal durante varias semanas después que la infección se haya resuelto.

BUSQUE ATENCION MEDICA SI:

• Los ganglios se vuelven rojos y sensibles.

• No disminuyen su tamaño y siguen creciendo.

• Están endurecidos.

• Ocasionan fiebre o sudoración excesiva.