Todas las pieles son delicadas y merecen de un cuidado especial. Una de las principales afecciones de la piel son los vellos encarnados. A menudo, después de una afeitada al ras, la punta del cabello puede volverse hacia la piel y enroscarse, penetrando la pared del folículo, y ocasionando una reacción de hinchazón.

PARA EVITAR ESTO, DEBERIA:

• Afeitarse con un tipo especial de navaja que no permita una afeitada demasiado al ras.

• No estire la piel durante el proceso de rasuración y no se afeite a diario. Si el pelo se encarna, levántelo con una aguja limpiada con alcohol (no lo corte ni lo arranque), justo antes de afeitarse.

• A veces, usar una toallita áspera antes de rasurarse, puede ayudarle a aflojar los vellos