Fue una masacre despiadada. Demasiado "bla, bla, bla" y al final fue la esquina la que tuvo que salvar al panameño Vicente "El Loco" Mosquera, de la paliza que le dio anoche el venezolano Edwin Valero.

A Mosquera sólo le faltó que le dieran con el cubo. Recibió golpes mortales por todos lados, hasta en el mismo cielo de la boca. Fue un final triste... la peor manera de decirle adiós al título Súper Pluma de la AMB.

MASACRE TOTAL

Terror... aquello era una verdadera pesadilla. Aunque muchos aún no lo podían creer, el panameño Vicente "El Loco" Mosquera estaba en la lona. Su rival, el venezolano Edwin Valero le había demostrado nuevamente al mundo entero que tenía dinamita en sus puños.

Mosquera se levantó. No estaba mal, pero a Valero no le importaba, porque nuevamente se lanzó al ataque y con una po tente derecha envío a su presa a la lona.

Los minutos pasaban y todos en el Figali Convention Center rogaban que terminara el asalto. Al final, las súplicas fueron escuchadas.

Para la segunda vuelta, las metrallas cargadas de cloroformo puro siguieron cayendo, pero esta vez por ambas partes. Lo que se vivía era una verdadera batalla campal.

Los gritos de "Loco", "Loco", "Loco" no dejaban de escucharse. Quizás eso era lo que necesitaba Mosquera, porque en el tercer asalto envió a la lona a Valero. Aquello era un carnaval. Hielos y vasos volaban por todos lados, porque al que muchos creían como invencible, estaba recibiendo por primera vez en su carrera la cuenta de protección. Fue un asalto claro para el panameño

GUERRA A MUERTE

Nadie quería dar su brazo a torcer. Para muestra fue que los asaltos cuarto, quinto y sexto estuvieron llenos de metrallas a quemarropa. Derechas e izquierdas volaban en el ensogado. Era una batalla entre dos guerreros que no presentaban ningún tipo de técnica, que sólo estaban tratando de finalizar las acciones a pura fuerza bruta.

TRISTE FINAL

De repente, cuando todo el mundo pensaba que Valero no iba a poder subir la loma, sucedió lo contrario. Los asaltos siete, ocho y nueve fueron de total control para Valero. El panameño, por su parte, estaba totalmente "flateado".

Lo que se respiraba en el ambiente era un triste final y así sucedió, cuando a los dos minutos del décimo round, la esquina del panameño decidió tirar la toalla.

DATO

Luego del combate, Mosquera fue llevado directamente al hospi tal, porque tenía mu chos dolores en las cos tillas y en el brazo.