Las familias tienen negocios que los ayudan a salir adelante.
Miguel Santamaría
| Chiriquí, DIAaDIA
Buscan generar sus propios ingresos. El financiamiento de recursos para el cultivo de huertos familiares y el establecimiento de pequeños negocios, como restaurantes, son parte de los microproyectos en los que participan miembros de la etnia Ngöbe Buglé.
Según informes del Proyecto Rural Ngöbe Buglé (PNB), en lo que va del año 2009 se han destinado B/29 mil 466 dólares, para apoyar a 767 indígenas residentes en las regiones comarcales Ño Kribo y Nedrini.
En las comunidades de Bisira, Quebrada Tula, Silico Creek y Hato Chamí se financiarán los huertos familiares y los micronegocios para impulsar el desarrollo sostenible en estas áreas.
En el caso de los pequeños productores de Hato Chamí, éstos se dedican al cultivo del apio, tomate, lechuga y zanahoria. Mientras que en Silico Creek y Quebrada de Tula siembran otros rubros como el dasheen, la yuca, el plátano y el guineo.
Parte de estos productos son para el consumo de las familias. Los excedentes de la producción se comercializan en los mercados locales.
Balbina Montezuma, representante del grupo familiar Janalayda, manifestó que las partidas que se destinan para el desarrollo de los microproyectos son necesarias para reducir los altos niveles de pobreza y pobreza extrema que llegan casi al 90% de la población indígena que reside en la comarca.