¿Algún día han hecho algo que consideran correcto, pero para ciertas personas está mal?, me imagino que la mayoría de ustedes respondieron que sí.
Un día normal hace dos meses me disponía a tomar el bus para irme a mi casa, cuando de pronto vi a un perrito enfermo y muerto de hambre en medio del pasillo, quizás para muchos esta es una escena rutinaria, pero para mí significó más que eso, ya que tengo un perro al que adoro y no me gustaría que pasara por esa situación a la que muchos canes están expuestos en prácticamente todo el país.
Luego fui a una fonda a la que no quería entrar por evitar sentir la tentación de comprarme alguna fritura y le pedí a la joven que me diera B
1.00 de hígados de pollo, o sea ocho pedazos más las ñapas que siempre me dan por ser cliente frecuente del lugar, además, como acompañamiento pedí dos hojaldres.
Al salir del local, me acerqué al perro, me agaché, abrí el cartucho y le acomodé la comida para que estuviera cerca de su hocico. El perrito, con sus ojos llenos de lagañas, me mira un poco asombrado y se dispone a comer con una desesperación impresionante.
Al levantarme, veo a las personas que estaban haciendo la fila para subir al bus mirándome con extrañeza, y una señora mayor le dice en voz baja al señor que estaba a su lado que yo era una loca.
"No puede ser que haya gente tan egoísta e ignorante" fue lo primero que me vino a la mente. ¿Sólo por el hecho de que sea un animal no merece comer igual que un humano?, si esa es la mentalidad de mis lectores les digo que se equivocan. Como lo mencioné en una columna, un profesor de la universidad me dijo algo muy cierto, el animal mata por necesidad mientras que el ser humano lo hace por venganza, ira y lo más triste hasta por mera diversión. En definitiva, debemos aprender más de estos "seres irracionales".
Y si por hacer el bien y ayudar a quien lo necesita seré señalada como una demente, entonces, que me digan loca.
