Espertos de la Policía Nacional desactivaron dos artefactos explosivos que fueron localizados por pobladores del sector cuatro de El Progreso final, en La Chorrera.
Los explosivos eran municiones de mortero 85 milímetros, similares a los utilizados por el ejército estadounidense.
En esta área, ha sido frecuente el hallazgo de este tipo de artefactos explosivos, al estar construyéndose las residencias, aunque inicialmente, los niños que los encontraban, los golpeaban, para quitarles la tierra y venderlos en compra-venta de metales. Esto ponía en riesgo sus vidas.
Incluso, algunos residentes los conservan en sus casas como meros artículos decorativos o de colección.